de Tiempo Ordinario - Ciclo B
7/06/15
Mc 14,12-16.22-267/06/15
El envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: "Vayan a la ciudad; allí se encontrarán con un hombre que lleva un cántaro de agua. Síganlo, y díganle al dueño de la casa donde entre: El Maestro dice: "¿Dónde está mi sala, en la que voy a comer el cordero pascual con mis discípulos?".
El les mostrará en el piso alto una pieza grande, arreglada con almohadones y ya dispuesta; prepárennos allí lo necesario".
Los discípulos partieron y, al llegar a la ciudad, encontraron todo como Jesús les había dicho y prepararon la Pascua.
Mientras comían, Jesús tomo el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: "Tomen, esto es mi Cuerpo".
Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, y todos bebieron de ella.
Y les dijo: "Esta es mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos.
Les aseguro que no beberá más del fruto de la vid hasta el día en que beba el vino nuevo en el Reino de Dios".
Después del canto de los Salmos, salieron hacia el monte de los Olivos.
Palabra del Señor
ReflexiónCorpus: acoger y compartir
La fiesta del Corpus Christi nos pone cerca del corazón, de nuestro corazón, para alcanzar el Corazón de Dios que se entrega, partido y repartido, en la Eucaristía. En este ejercicio, diálogo entre corazones, se genera en nosotros la dinámica del compartir. Damos porque hemos recibido. Damos porque hemos acogido el misterio del Amor y queremos amar. La mejor manera de amar compartir. Compartir el pan, compartir el tiempo, compartir la escucha, compartir el silencio, compartir la alegría…
Hemos acogido al Señor en la intimidad del corazón. Él nos ha revolucionado para ser cuerpos “eucarísticos” que se entregan y se comparten.
Feliz fiesta del Corpus Christi.
Dibu: Patxi V. Fano Texto: Fernando Cordero ss.cc. Fuente: http//blogs.21rs.es/kamiano
No hay comentarios:
Publicar un comentario