29º Domingo
de Tiempo Ordinario - Ciclo B
"El pedido de Santiago y Juan"
18/10/15
Mc 10,35-45
Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo, se acercaron a Jesús y le dijeron: «Maestro, queremos que nos concedas lo que te vamos a pedir».
El les respondió: «¿Qué quieren que haga por ustedes?».
Ellos le dijeron: «Concédenos sentarnos uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, cuando estés en tu gloria».
Jesús le dijo: «No saben lo que piden. ¿Pueden beber el cáliz que yo beberé y recibir el bautismo que yo recibiré?».
«Podemos», le respondieron. Entonces Jesús agregó: «Ustedes beberán el cáliz que yo beberé y recibirán el mismo bautismo que yo.
En cuanto a sentarse a mi derecha o a mi izquierda, no me toca a mí concederlo, sino que esos puestos son para quienes han sido destinados».
Los otros diez, que habían oído a Santiago y a Juan, se indignaron contra ellos.
Jesús los llamó y les dijo: «Ustedes saben que aquellos a quienes se considera gobernantes, dominan a las naciones como si fueran sus dueños, y los poderosos les hacen sentir su autoridad.
Entre ustedes no debe suceder así. Al contrario, el que quiera ser grande, que se haga servidor de ustedes; y el que quiera ser el primero, que se haga servidor de todos.
Porque el mismo Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud».
Palabra del Señor
Reflexión
Francisco, el primero en servir
Esta semana, nuestro querido Patxi, le hace un pequeño homenaje al Papa Francisco. Homenaje bien merecido, por cierto. Al hilo del Evangelio dominical y del Sínodo de la Familia que se está celebrando en Roma, nuestro dibujante ilustra al Obispo de Roma, en actitud de servicio, como si fuera a lavar los pies, a la hora de ofrecer el Evangelio de Jesús, que tiene como contenido fundamental la misericordia. El Espíritu revolotea muy cerca de Él, animando su entrega.
Frente a los hijos de Zebedeo que querían los principales puestos en la gloria, el papa nos recuerda que la vocación propia del cristiano es servir y ofrecer la misericordia que emerge de las páginas de la Buena Noticia. Esa es la tarea que realizan los misioneros por todo el mundo, un mundo que aparece dibujado con alegría pero que está sudando “la gota gorda”. Hace falta una buena dosis de misericordia que alegre los corazones de las personas. De ahí que el lema de este año sea “Misioneros de la Misericordia”.
Con un poco de humor..., Fano pinta una Iglesia y un mundo sonriente. Detrás de la Iglesia, un obispo un tanto extrañado con la actitud de sirviente del papa Francisco. Ojalá nos vayamos dando cuenta todos los que formamos la comunidad eclesial que en el núcleo del Evangelio reside el servicio. “Lo nuestro es servir”. Ser servidores de la Misericordia de Dios. ¡Casi nada!
Además del Sínodo de la Familia, tengamos presente en nuestra oración a todos los misioneros y misioneras que alegran con sus vidas este mundo falto de calor y de hogar. Misioneros de la Misericordia, amigos de Jesús y del Evangelio.Dibu: Patxi Velasco Fano Texto: Fernando Cordero ss.cc. Fuente: http://blogs.21rs.es/kamiano